Recordamos cuando fuimos a buscarte nuestro bebé, y ahora nuestro grandullón y nuestra familia, fuiste el perro más noble y más bueno que pueda haber. Eres un ángel tocado por la mano de Dios, pura bondad. Te fuiste antes de tiempo y sin avisar, pero siempre estarás con tu familia en casa como una llama de luz que jamás se apagará de nuestro corazón. Siempre juntos porque somos una familia